Ya hace cuatro días que dimos inicio a los Juegos Masculinos, y los futbolistas más jóvenes no quisieron quedarse fuera. Para ello, hoy por la mañana se realizó un cuadrangular en las canchas número 1 y 2 del Estadio Marista, esta vez de la categoría infantil. Los participantes fueron cuatro colegios, entre ellos el Instituto Santa María de Limache, Colegio San Alberto de Machalí, el Instituto Alonso de Ercilla de Santiago, además del local Instituto O’Higgins.

A las 12 horas se dio el puntapié inicial a este cuadrangular. Por un lado, el Instituto Alonso de Ercilla se enfrentó al Colegio San Alberto. Éste fue un partido bastante reñido, logrando efectuar ambos equipos dos goles. Por lo mismo, debieron definir su victoria en penales, al mejor de tres. El ganador de este enfrentamiento fue el Colegio San Alberto, anotando 2 goles a 0 a su favor.

En la cancha paralela se desarrolló el partido entre los locales contra el Instituto Santa María, proveniente de Limache. En éste, los visitantes se adjudicaron la victoria, efectuando 3 goles sobre dos del Instituto O’Higgins. En este partido además, los rancagüinos finalizaron jugando sólo con 10 jugadores, luego de la expulsión de un jugador en los últimos minutos.

Ya con los ganadores de ambos grupos, las canchas fueron dispuestas para las definiciones. A las 13:15 horas comenzó el partido por el tercero y cuarto lugar, entre los maristas Instituto O’Higgins y el Instituto Alonso de Ercilla. Este último consiguió el bronce, anotando 3 goles en la portería rival, mientras que IOH logró efectuar sólo 1.

Al mismo tiempo, y en la lucha por la ansiada copa, se desarrolló el partido entre el Colegio San Alberto y el Instituto Santa María. El partido fue muy expectante y prácticamente en igualdad de condiciones. Ambos equipos realizaron 2 goles, y en medio de la ansiedad, debieron definir en penales. Sin embargo, el tan ansiado oro lo consiguieron los oriundos de machalí del Colegio San Alberto, quedándose con la plata el equipo Santa María de Limache

Sin duda una mañana muy motivada y con mucha expectación para los futbolistas, los que lograron impregnarse de la pasión vivida en este período de Juegos Maristas.


Fotografías: Mabel Camilo